Hola, soy Clarisse. Me siento algo decepcionada por el hecho
de que nadie me haya invitado a
escribir. Pero aquí estoy. Tan sólo quería contar una pela que tuve ayer con
dos hijos de Apolo.
Estaba entrenando en el rocódromo cuando aparecieron esos
hijos de Apolo. Me empezaron a decir que bajase, pero yo no les respondí, y
entonces se enfadaron. Me gritaron que ya les tocaba, que llevaba mucho rato.
-Iros a la mier…- mis palabras se vieron ahogadas por un
grito-chillido de guerra de uno de los hermanos.
Entonces subió a toda velocidad al rocódromo y yo, en
defensa propia, le pegué una patada en la cara y se cayó de unos cinco metros.
La reacción del otro fue semejante. Se lanzó a por mí con
una mirada de odio, pero esta vez fue él el que me tiró de ahí arriba. Después saltó con intención de caer en mis costillas,
algo que yo no le permití así que, desgraciadamente, cayó con la cara por delante
del resto del cuerpo. Entonces Quirón
apareció, y con una simple mirada supe que la había cagado. Me pase la noche
fregando, no sin antes la charla del centauro.
Por cierto, Annabeth, me he apuntado a tu estúpido curso de
supervivencia. Como monitora, por supuesto.
De la mejor hija de Ares
Clarisse de la Rue
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Un retrato hecho por Rachel. Ya sabes, el oráculo que le sale humo verde.
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